Como ya expliqué en otro "post", me entregaron mi compañera (la AgenteNaranja) el 6 de diciembre, sin embargo, un par de días después he tenido un "resbalón" de lo más estúpido y pues, se han quebrado las direccionales izquierdas, además de que me he lastimado un poco la espalda... motivos ambos por los cuales decidí aplazar mi inicio de "rodada" en la vida cotidiana, algunos días.
Y bueno... resulta que el primer día en que he utilizado a mi compañera de manera cotidiana, fue el 15 de diciembre... el lunes pasado.

Curiosa/paradójicamente... en esa misma fecha, pero 13 años antes, un GRAN amigo (Joaquín) sufrió un accidente fatal, precisamente montando su motocicleta... una Kawasaki LTD 454.
Por la mañana de este lunes... no me vino a la cabeza el asunto... sin embargo en la noche al salir del trabajo, de regreso a casa, me "brincó" todo lo ocurrido hace algunos años (en 1995, para ser exacto) era una noche de viernes.
Al darme cuenta de las coincidencias... me puse a reflexionar (al menos un poco) en cosas tan amplias y enormes como la vida misma, lo mismo que en lo fácil que se nos puede ir... y por supuesto que también en lo que implica el estar "rodando" diariamente en dos ruedas, bien sea en México, en España, en China o en cualquier lugar de este planeta.
No pretendo que este sea un post "lastimero" ni de queja... al contrario, es un mero espacio de reflexión personal que he querido dejar por aquí, reflejado.
Sirva la "casualidad" de fechas... para enviar un saludo a mi queridísimo Joaquín, donde sea que sea (así como a tod@s ustedes) para poderles presumir a mi AgenteNaranja... que de seguro hubiera sido una gozada el poder andar rodando juntos por los caminos y por la vida con aquel chaparro (bajito) y simpático fulano.
Y me imagino que... alguien allá afuera, tendrá alguna historia similar o al menos habrá sabido de casos por el estilo.
De compañer@s que toman "otra ruta"... y se adelantan a la llegada final.
Montad@s en sus "caballitos de batalla".
En esta noche, desde el ordenador de mi casa, bebiendo un par de tragos, de este lugar del planeta (México)... y gracias a la tecnología, quiero hacer un honesto y cariñoso brindis por mi, por tod@s vosotr@s y por quienes ya no se encuentran por este sitio... en honor del gusto que es compartir la vida a bordo de una V-Strom... o de cualquier otra montura que nos haga sentir eso que, ninguna otra cosa sobre la tierra podría provocar.
No me queda más que agradecer la oportunidad de haber externado esto... y pedirles que samos felices (que realmente poco nos cuesta) y sigamos compartiendo lo que nos gusta, nos duele y nos hace seguir por los caminos.
Un abrazo a todo quien lea esta extraña reflexión divagante de mi noche de viernes... jejejeje!!!
Desde México... con cariño y respeto.
J. Lobo
No hay comentarios:
Publicar un comentario